Las redes sociales son una plataforma que puede servir de aliada a los medios de comunicación. El periódico inglés The Economist ha sabido aprovechar los recursos que ofrece LinkedIn para aumentar su número de suscriptores.
The Economist empezó a usar esta LinkedIn hace aproximadamente una década, subiendo contenidos comerciales y financieros con el propósito de que sus seguidores los compartiesen. En aquel momento esta red social se utilizaba básicamente para la búsqueda de trabajo o contactos laborales.
Sin embargo, con el paso de los años LinkedIn se fue transformado y, de igual manera, tuvieron que adaptarse los contenidos publicados. Durante los últimos años The Economist ha centrado su atención en los contenidos publicados en esta red con el fin, no solo de obtener más seguidores, sino también suscriptores.
Los post, a pesar de que mantienen un contenido intrínseco al periódico, han abierto su temática a otros campos como la ciencia, la tecnología y la cultura lo que ha hecho que más personas se interesen por ellos. Tanto es así que durante este año dos de las cinco publicaciones con mejor tráfico han sido culturales. Incluso en agosto la historia que mejor tráfico ha reportado ha sido una referente a citas durante la pandemia.
Además, el equipo de redes sociales de The Economist, formado por nueve integrantes divididos en las sedes de Londres y Nueva York, son los encargados de seleccionar diariamente las nueve historias que se van a publicar en LinkedIn. Lo hacen regularmente en un horario fijo para crear en sus seguidores un hábito.
Estas publicaciones combinan tres formatos: enlaces a artículos, vídeos y datos. El formato audiovisual es el que mayor número de interacciones genera, por ser un formato nativo a la plataforma, pero incluso se han creado subtítulos más largos para alentar a sus seguidores a leer más.
Todas estas acciones han conducido a un aumento en el número de seguidores de un 39.5% alcanzando la cifra de 11.4 millones. Año tras año, The Economist consigue duplicar su número de seguidores en LinkedIn, es una de sus redes más populares, solo por detrás de Twitter, y este año ha conseguido triplicar las suscripciones orgánicas provenientes de esta red.
La métrica clave que calibra el éxito de LinkedIn es la gran cantidad de comentarios que se generan en los post, muestra de que el contenido es capaz de generar debate. Tanto es así que las interacciones este año han aumentado un 251% y las impresiones un 287%.
Estos datos arrojan que las plataformas sociales son embudos capaces de impulsar audiencias potenciales que son susceptibles de convertirse en suscriptores. Aunque la tasa de conversión aún no alcanza cifras reseñables sí que se deben tener en cuenta en los planes estratégicos de un futuro no muy lejano.