Agentes relevantes de la industria publicitaria, entre los que se encuentra AMI, unen fuerzas en torno a la idea de que hay que apostar por una publicidad responsable. Para definir las reglas que marcarán el futuro del sector han creado un decálogo de intenciones.
La Asociación de Medios de Información (AMI) junto a otros 18 firmantes, entre los que se encuentran asociaciones como las de Agencias de Medios o de Revistas, acaban de poner en marcha la plataforma ¡Publicidad, Sí!, con el objetivo de promover la importancia social y económica de la publicidad en la sociedad y de reivindicar esta actividad como lo que es: un pilar fundamental del desarrollo económico, social y cultural que contribuye al desarrollo del país.
El sector de la publicidad en España genera un volumen de negocio de 18.720 millones de euros, lo que representa el 3,5% de todo el sector servicios en nuestro país, y más de 100.000 empleos. Es una industria puntera y reconocida a nivel internacional de la que forman parte 40.859 empresas, según datos del Instituto Nacional de Estadística, recogidos en el informe del Observatorio de la Publicidad 2020.
En una sociedad basada en la libre competencia, la publicidad es clave puesto que ofrece al consumidor información sobre los distintos productos y servicios existentes en el mercado, facilitando así que pueda tomar decisiones informadas y libres. Al mismo tiempo, impulsa la innovación incentivando a las empresas a superar a sus competidores mediante la creación de productos y servicios diferenciados.
El sector de la publicidad está en proceso de transformación con la aparición de nuevas formas de comunicación que están cambiando nuestra manera de relacionarnos. Y se están definiendo las reglas que marcarán el futuro de nuestro sector. Por ello, y con el ánimo de aportar propuestas, la Plataforma ¡Publicidad, Sí!, en su apuesta por una publicidad responsable, ha elaborado el siguiente decálogo para esta nueva era:
1. El sector español de la publicidad es uno de los sectores de mayor reputación internacional y reconocido a nivel global.
2. Ayuda a la sostenibilidad de los medios de comunicación, lo que permite contar con una sociedad libre e informada.
3. Es garante de una publicidad ética y responsable, ya que cuenta con códigos de autorregulación y, además, es uno de los sectores más regulados de la sociedad española.
4. Contribuye, también, a difundir mensajes de carácter social que benefician a los colectivos más desfavorecidos.
5. Es un motor fundamental de la competitividad, que garantiza el crecimiento y la generación de valor de las empresas.
6. Pero para seguir siendo competitivos en este mundo conectado y digital, España debe apostar por una regulación adaptada a la realidad actual marcada por la transformación digital en línea con la decidida apuesta del Gobierno de España por la digitalización.
7. Esa regulación debe aunar que los anunciantes puedan comunicarse con sus públicos, al tiempo que protegen a los colectivos más sensibles. Y todo ello, a través de una legislación proporcional, equitativa e igualitaria para todos los medios de comunicación que son un altavoz indispensable para el sector.
8. España tiene una oportunidad para generar un contexto regulatorio que la sitúe a la vanguardia y como un modelo a seguir que permita el desarrollo de nuestro sector.
9. Para construir ese nuevo modelo publicitario es necesario un diálogo y un compromiso entre todos: sector publicitario, gobierno y el legislador.
10. Consideramos necesario que la administración y el legislador tengan en cuenta al sector de la publicidad para cualquier desarrollo del marco regulatorio de nuestra actividad.
Y por todo ello, se solicita a la Administración y al legislador que abran un diálogo urgente con el sector de la publicidad que permita el diseño de un marco regulatorio equitativo e igualitario, para lo que nos ponemos a su disposición.