La reducción del IVA Digital como desarrollo de las estrategias de pago
La crisis sanitaria que está azotando al mundo junto con su correspondiente confinamiento hacen que las ventas de productos culturales digitales se disparen. Eran muchas las voces que se alzaban en contra de pagar el 21% de IVA por estos productos y finalmente el Gobierno lo ha reducido hasta el 4%. Esta disminución consigue la ansiada igualdad entre el negocio digital y el impreso y puede resultar, además, un revulsivo en productos como los muros de pago de los periódicos.
Finalmente, el Gobierno ha escuchado la demanda de los medios de comunicación de reducir el IVA digital de un 21% al 4%, o lo que es lo mismo, los productos digitales dejan de pertenecer al grupo de IVA general (en donde se encuentran productos como la gasolina, el alcohol o el tabaco) para categorizarse en el llamado IVA superreducido, como los medicamentos, la leche o la verdura.
Esta petición venía arrastrándose ante los distintos ejecutivos, marcando un punto de inflexión y de justicia el Ecofin de 2018, en donde los ministros de economía de la Unión Europea llegaron a la conclusión de que los productos digitales, como libros o revistas, debían tener el mismo IVA que su versión en papel. Algo que los editores de periódicos digitales venían reivindicando para poder desarrollar su negocio con las mismas condiciones que el impreso.
El sector editorial, pese a ser considerado como de primera necesidad, viene arrastrando pérdidas económicas muy serias desde la declaración del estado de alarma. Por ello, ha acogido la medida con gran alegría considerándola “muy positiva por lo que puede suponer incentivar el consumo del libro digital, así como el desarrollo digital en el ámbito del libre educativo”, afirma Miguel Barrero, presidente de la Federación de Gremios de Editores de España.
La decisión venía aplazándose años. El ministro de Guindos ya afirmó en 2016 que los libros y publicaciones digitales pagarían los mismos impuestos que los impresos asegurando que “la idea es la convergencia total hacia los tipos de IVA que tiene la prensa impresa”. Esta bajada venía siendo un caballo de batalla para la Asociación de Medios de Información (AMI), así como la Federación de Gremios de Editores (FGEE), que venían peleando por reducir la desigualdad en cuanto al IVA para la prensa, revistas y libros digitales.
Por otro lado, la reducción en el porcentaje del IVA digital anima también a la prensa porque puede resultar, también, una gran oportunidad para desarrollar las estrategias de pago. A pesar de que el Gobierno calcula que la reducción de ingresos para el Estado que traerá consigo esta medida ascenderán hasta los 24 millones de euros, se asegura que esta decisión se toma para ayudar a los medios de comunicación, un sector que está viendo sus ingresos “mermados” debido a la crisis sanitaria del Covid-19. La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha declarado que el ejecutivo es consciente de la situación preocupante que está viviendo el sector periodístico por lo que se trata de “una iniciativa legislativa que pueda beneficiar al conjunto de empresas que lo conforman”.
