Con el fin de acabar con las noticias falsas que azotan Brasil, varias instituciones de gran calado en el sector periodístico han decidido unirse para buscar soluciones. Esta coalición pretende crear unas leyes que regulen los medios de comunicación, especialmente los digitales.
En Brasil, 27 instituciones representativas del sector de la comunicación, entre las que se encuentran la Asociación Brasileña de Agencias de Publicidad o la Asociación Nacional de Editores de Revistas, se han unido para combatir las fake news en el país. Lo hacen bajo una coalición que tiene como objetivo reiterar la extrema relevancia que tiene el tema de las noticias falsas y con el convencimiento de que las mejores soluciones no residen en vigilar a los usuarios, sino en los modelos de contratación de servicios de Internet.
La idea es crear leyes y asentar jurisprudencia que actúen contra la desinformación de la ciudadanía y también a favor de la libertad de expresión y de pensamiento, así como la vigilancia de las herramientas digitales.
Esta coalición contribuye a que se apliquen las leyes estipuladas en Brasil para que se identifiquen patrocinadores, incluida la propaganda política y partidaria. También obliga a una transparencia clara en la distinción entre contenido informativo, contenido promocionado y publicidad, incluido el contenido de propaganda política. Además, pretende que la venta de espacios publicitarios que se lleve a cabo dentro del país se haga según las leyes brasileñas.
En cuanto a los medios digitales, deben seguir las normas para la protección de la libre competencia, especialmente en el uso de tecnologías para procesar y analizar los datos de los usuarios mediante la publicidad dirigida. Se busca seguir los ejemplos que se practican en el resto del mundo, donde se tienen en cuenta los estándares que se rigen por las autoridades nacionales.
Por otro lado, se estipula que el contenido periodístico utilizado por los proveedores de aplicaciones de Internet se pagará directamente a las empresas periodísticas y profesionales del medio. Una remuneración justificada no solo por el uso y monetización de los contenidos, sino también por la relevancia para combatir la desinformación.
El grupo de trabajo llevará a cabo informes semestrales de transparencia que deberán contener los criterios, metodologías y métricas necesarias para medir el alcance de los contenidos impulsados por la publicidad, sujetos a verificación y autoría independiente.
Esta llamada Coalición de Libertad y Responsabilidad está plenamente convencida de que el periodismo profesional y de calidad es la clave para combatir la desinformación.